La tarde cayendo está-. En el corazón tenía. la espina de una pasión; logré arrancármela un día; ya no siento el corazón. Y todo el campo un momento. se queda, mudo y sombrío, meditando. Suena el viento. en los álamos del río. La tarde más se oscurece; y el camino se serpea. y débilmente blanquea, se enturbia y desaparece. Mi
sonóen el silencio de la tarde muerta. Yo escucho los cantos . Yo escucho los cantos cual vierten sus aguas . Antología Antonio Machado - 3 . En el corazón tenía la espina de una pasión; logré arrancármela un día; ya no siento el corazón. Y todo el campo un momento se queda, mudo y sombrío, meditando.Nohay cobertura de móvil ni nadie que comente, se queje, admire o pida un receso en la caminata. Por todo eso, y quién sabe por qué otras cosas, he recordado un fragmento de un poema de Machado: “En el corazón tenía la espina de una pasión; logre arrancármela un día: ya no siento el corazón” 2 Las orquídeas se adaptan a todo tipo de climas, aunque se desarrollan mejor en las regiones tropicales. 3. ¡Válgame Dios! ¡Qué tremendo susto me llevé! 4. Entren a la cancha con valor y les aseguro que conseguirán el triunfo. 5. En el corazón tenía la espina de una pasión, logré arrancársela un día: ya no siento el corazón. 6. Cita En el corazón tenía la espina de una pasión. Logré arrancármela un día: ya no siento el corazón. Antonio Machado , Campos de Castilla. Corazón. y7wPn3i.